Para que las personas puedan evolucionar junto al progreso tecnológico deben ser protagonistas de esta transformación
La evolución tecnológica que está teniendo lugar en los últimos tiempos se produce a una velocidad de vértigo que, en la mayoría de los casos, sobrepasa a la capacidad humana para adaptarse y asimilar estos cambios.
En este contexto, he visto una gran preocupación entre los altos mandos de las grandes empresas españolas. Eran plenamente conscientes de que la continuidad de sus empresas pasaba por realizar grandes inversiones en tecnologías como la inteligencia artificial o la robotización de procesos, que garantizaran el potencial de sus productos y servicios ante una competencia cada vez mayor y más global.
No obstante, en muchos casos la preocupación no era tanto conseguir la inversión necesaria para transformar tecnológicamente sus grandes empresas, sino cómo hacer que las personas fueran capaces de asimilar tales cambios en el actual modelo operativo y, además, que estas mismas personas fueran las propias impulsoras de dicha transformación. Serían necesarios conocimientos, muchas habilidades y, sobre todo, aptitudes que elevaran a todas las personas a nuevos niveles de especialización.
¿Cómo asegurar la participación e involucración de los trabajadores?
Para conseguir que todas las personas se sumen a la evolución tecnológica, a las empresas con las que trabajamos les proponemos explotar el talento innato de cada una de ellas, como el vehículo para sumarse a la transformación tecnológica que está acaeciendo. Fomentar y desarrollar el talento no es fácil, pero sí posible. Y eso era suficiente para ser optimistas y pensar en que una transformación cultural era factible.
Así pues, implantamos programas de desarrollo personal y evaluaciones 360º para fomentar las aptitudes y habilidades en base a las necesidades de cada compañía. Los programas se enfocan de tal manera que todas las personas sean partícipes y verdaderas protagonistas de la transformación cultural que se avecina. El objetivo es aprovechar al máximo el talento de las personas y potenciar aquellas habilidades y conocimientos en los que son realmente buenas y en las que se sienten motivadas.
En paralelo, impulsamos autoformaciones que abarcan diferentes aspectos, tales como conocimientos necesarios para sobrevivir en el nuevo escenario tecnológico o desarrollo de habilidades y aptitudes personales que permitan a las personas evolucionar junto al progreso tecnológico inherente.
Los programas tienen la particularidad de que se imparten de forma totalmente experiencial, suponiendo una mejora del 70% con respecto a los métodos tradicionales para retener y consolidar los nuevos conceptos.
Hacia experiencias de aprendizaje continuas
La impartición de las formaciones se hace a través de talleres, sesiones de coaching y dinámicas de grupo donde se toma consciencia de los principales conceptos a aprender. Las nuevas tecnologías para la formación como la gamificación, de la cual ya hemos hablado en otras ocasiones, juegan un papel importante para consolidar los conceptos a través de apps para móviles, tipo Trivial, con pequeños retos online a conseguir, individualmente o con otros compañeros.
El éxito es tal que hemos detectado cómo las personas, después de su horario laboral habitual, se conectan para conseguir más puntos que sus compañeros de oficina, a la vez que se retan a superar sus propios récords. En este momento, sin darse cuenta, están formándose y ganando experiencia en el juego y en la vida real. A su vez, están contribuyendo al cambio cultural y tecnológico que necesita su propia empresa.
A modo de conclusión diría que, para avanzar junto al progreso tecnológico, a las personas no nos queda otra que evolucionar al mismo ritmo. Y, basándonos en nuestra propia experiencia, constatamos que las vivencias experienciales y la autoformación basada en la gamificación, son una de las formas más rápidas de consolidar cualquier tipo transformación en una empresa, fomentando y ayudando a desarrollar el talento.
Ana Sánchez
Experta en Transformación y Gestión del cambio
Mentoring | Formación | Ponencias